La cercana relación con el conjunto argentino de River Plate se da por la llegada de manera "pirata" de tres baluartes de la famosa "Máquina de River": el maestro Adolfo Pedernera, Néstor "Pipo" Rossi y Adolfo Di Stéfano en el año de 1949, gracias a la gestión de Don Alfonso Senior quien enviá a Buenos Aires al técnico Carlos Roberto "Cacho" Aldabe para buscar refuerzos para encarar el torneo del mismo año.
En 1951 llega también Hugo Reyes para terminar el engranaje junto a Cozzi, Mourin, Zuluaga, Castillo, Soria, Báez, Pini, Ocha Uribe, Ramirez entre otros, el famoso Ballet Azul.
El primer encuentro entre estos dos conjuntos se da el 4 de enero de 1953 en la ciudad de Bogotá, donde los riverplatenses vencen al conjunto embajador por marcador de 1-3, uno de los goles de Ángel Labruna de chilena. Fue un encuentro donde jugaban las estrellas embajadoraas contra sus antiguos compañeros de la "Máquina". Los argentinos ganaron ampliamente y sin atenuantes para demostrarle a los argentinos de El Dorado que seguían siendo invencibles.
La revancha se daría un mes después, el 8 de febrero, Millonarios enfrentaba a River en el estadio Monumental de Nuñez "Antonio Vespucio Alberti". El partido terminó empatado a cero goles pero es reseñado por la prensa bonaerense como uno de los mejores del último año, destacando al hasta entonces poco conocido club de Bogotá.
LLegarían los partidos por el torneo de la Pequeña Copa del Mundo donde disputaron dos encuentros, el primero de ellos, el 15 de febrero, cuando Millonarios vapuleo y humilló al conjunto argentino por marcador de 5-1. Era la primera vez que la famosa "Máquina" era goleada en casi 8 años, desde que salió esa gran generación de cracks que ganaban todo en Argentina. El 17, dos días después, se esperaba la revancha rioplatense pero tuvieron que conformarse con el empate a un gol.
Tuvieron que pasar 4 años para que se volvieran a enfrentar "los millonarios". Ocurrió el 20 de enero de 1957 en una nueva gira de pretemporada de Millonarios en tierras argentinas. El marcador final fue un incípido 1-1 por todo lo que habia generado la prensa bonaerense.
Siete años después, 1964, en el mes de febrero, River Plate llegaba al Estadio El Campín luego de una exitosa y extensa gira por Suramérica donde alcanzó el empate a un tanto, a falta tan solo de 4 minutos para la finalización del partido.
El séptimo y último encuentro se realizó con motivo del Homenaje que se le rindió a Amadeo Carrizo, quien fuera portero emblemático de ambas camisetas. La alegría mostrada por Carrizo y por los jugadores de River Plate era notoria y sirvió para estrechar aun más la relación histórica entre los conjuntos más exitosos de Argentina y Colombia.
Amadeo Carrizo fue uno más de los jugadores que provenían del equipo de la banda cruzada, que vistieron con hidalguía la camiseta del Club Deportivo Los Millonarios, tal como ya lo habían hecho Pedernera, Rossi y Di Stéfano y los que se fueron sumando a lo largo de la historia embajadora, casos: Carlos Alberto Dellasavia y Juan Eulogio "El Vasco" Urriolaveitía en 1976, este último como entrenador remplazante de Humberto "Tucho" Ortíz.
Daniel "Tito" Onega quien llegó a Millonarios para aportar en el título de campeón en 1978, Juan Gilberto Funes, quien se hiciera grande en Millonarios y llevará a River Plate a coronarse campeón de la Copa Libertadores de 1986 y la Copa Intercontinental.
Como parte de la transacción de el "Búfalo de San Luís" arribaron Carlos Karabín y Oscar "el Pájaro" Juárez quienes fueron fundamentales en el título de 1987, Karabín recordado por ese golazo al Sao Pablo por la Copa Marlboro y Juárez repetiría en 1988.
Para afrontar la Copa Libertadores de 1989, Millonarios decidió traer a Sergio Javier Goycoechea (campeón con River en 1985, Libertadores 1986 e Intercontinental '86) para reforzar el arco embajador. Este mostró una gran capacidad debajo del arco y gracias a sus atajadas, los embajadores superaron los octavos de final del torneo continental tras eliminar en los penales al Bolivar de La Paz, también, sus actuaciones sirvieron para que Millonarios clasificará al cuadrangular final del cancelado torneo colombiano.
La último gran recuerdo que pudo acercar nuevamente a embajadores y rierplatenses, fue cuando Radamel Falcao García se consagraba campeón con el equipo argentino y celebraba con la camiseta azul de Millonarios encima del bus de la victoria. Radamel se ha declarado hincha furibundo de los embajadores.
Ha sido tanta la cercanía de ambos equipos que en el Estadio Monumental se puede ver una bandera que dice "Bogotá" con los escudos de ambos conjuntos, y en el Estadio El Campín se puede ver en la tribuna occidental una bandera que dice "Vamos Millonarios".
Esta es la relación de dos clubes grandes de Suramérica y del mundo, ambos catalogados como campeones del siglo en sus respectivos paises, no solo por sus logros nacionales sino internacionales y donde sus hinchadas se identifican con uno y otro club.
No hay comentarios:
Publicar un comentario